Antes de emprender
la travesía hacia nuevos artículo de EDUCACIÓN CANINA, AUTO
CONTROL o ADIESTRAMIENTO creo que es importante entender cómo
piensan nuestros perretes y el principio de asociación es básico:
cuando… entonces…
Por ejemplo: “cuando
levantas el índice, entonces debo sentarme”. Por ello si pasa
demasiado tiempo entre tu llamada y la llegada de tu perrete no debes
regañarlo por que la deducción de nuestro perrete es “cuando
vuelva donde está el jefe, entonces habrá regañina” y la próxima
vez tardará más todavía porque ya habrá ASOCIADO la reprimenda
con la llamada.
Un par de ejemplos
más: cuando ahuyento a un desconocido entonces este se va o cuando
muerdo la pata de la silla entonces se alivia el dolor de mis encías.
Si nuestro perrete
ha hecho tonterías por el dolor de la separación -porque se ha
quedado solo- no lo regañes cuando vuelvas ya que un perro no puede
asociar tu enfado con una mala acción ocurrida hace tiempo, sino a
lo sumo combinarlo de esta forma: “cuando llegue el jefe, entonces
me reñirá” y esta no es una buena base para una amistad.